Un año sin impuesto al sol

Hace poco más de un año, el 5 de octubre de 2018, el Gobierno derogó el denominado impuesto al sol impulsando de forma significativa el autoconsumo en España.

El impuesto al sol estaba recogido en el Real Decreto 900/2015 y hacía referencia a los importes a pagar por seguir conectado a la red eléctrica, aun sin hacer uso de ella, en concepto de costes y servicios del sistema. Este peaje de conexión debía ser abonado por aquellos consumidores que tuvieran instalado en su vivienda o inmueble un sistema de producción de energía solar fotovoltaica, quedando exentas las instalaciones de menos de 10 kW de potencia.

Con el RD 15/2018 se eliminaron las barreras regulatorias que habían dificultado y desincentivado la implantación del autoconsumo eléctrico en España. En este marco, se aprobó un paquete de medidas urgentes para facilitar la transición energética y la protección de los consumidores. El autoconsumo fue el gran beneficiario de esa nueva regulación al introducir principios técnicos, administrativos y económicas que ayudaron a potenciar sustancialmente el sector.

La nueva regulación se fundamentó en tres principios:

  • Simplificación de los trámites burocráticos y técnicos requeridos, como la inscripción en un registro para aquellas instalaciones no superiores a 100 kilovatios
  • Derecho al autoconsumo compartido por parte de uno o varios consumidores, lo que permitirá aprovechar las economías de escala
  • Supresión de peajes y cargos al autoconsumo de energía eléctrica generada y consumida en su propia instalación

Balance anual

En el último año el sector fotovoltaico ha vivido un importante crecimiento, logrando un incremento en el número de instalaciones de autoconsumo en todo el país, no solo entre las empresas, sino también a nivel doméstico.

Destaca sobre todo la implantación de sistemas de autoconsumo de energía fotovoltaica en el sector agroalimentario (granjas, bodegas, conserveras, distribución frigorífica y de congelados), así como en empresas madereras o estaciones de servicio.

La Administración también se está abriendo paso el autoconsumo con el objetivo de mejorar la eficiencia energética en los edificios públicos.

Eidf Solar ha registrado un crecimiento del 50 % en volumen de proyectos, pasando de 300 obras realizadas en 2018 a 450 en 2019. La potencia instalada en este año se aproxima a los 18 MW.

¿Qué mejoras son necesarias?

El crecimiento vertical del sector ha supuesto la entrada de agentes o empresas que quieren aprovechar el momento de auge en busca del beneficio máximo. Esto está provocando que haya actores que trabajen por volumen, sin tener en cuenta la calidad y sin aportar valor añadido a la instalación. Se prima el precio a la baja en detrimento del servicio al cliente.

En Eidf Solar consideramos que es prioritario garantizar la sostenibilidad del sector y, para lograrlo, es preciso una mayor regulación. A esto se suma la necesidad de, poco a poco, eliminar las subvenciones a fondo perdido para instalaciones fotovoltaicas y potenciar las exenciones fiscales al autoconsumo con bonificaciones en el Impuesto de Sociedades, IBI o IAE.

A nivel administrativo, el sector necesita una tramitación simplificada para instalaciones con excedentes, sobre todo para aquellas de más de 100 kW. Si el Gobierno está apostando por un modelo de generación distribuida, no puede dificultar el proceso de tramitación y legalización de plantas con vertido a red.

 

Deja tu comentario